Aparte de sus propiedades relajantes, los masajeadores para el cuero cabelludo tienen muchos beneficios a la hora de cuidar nuestro pelo. El cuero cabelludo es el sustento del cabello, y cuidarlo es tan importante como cuidar el pelo. Hacerse masajes regularmente es la mejor y más fácil manera de lograrlo, y además contribuye a oxigenarlo y mejorar la circulación, lo cual es clave para tener un cabello saludable.
A continuación, te mostramos los beneficios más importantes del uso del masajeador de cuero cabelludo.
1. Favorece el crecimiento del cabello
Masajear el cuero cabelludo estimula su vascularización e incrementa la circulación de sangre. Esto hace que la sangre fluya con más abundancia en el folículo piloso, que es donde nuestro cabello nace. De esta manera recibe todo el oxígeno y los nutrientes necesarios para su crecimiento. Como consecuencia, se estimula el crecimiento del cabello de forma natural y sin el uso de champús ni de otros productos caros e innecesarios.
2. Embellece el cabello
Al estar mejor oxigenado, el cuero cabelludo elimina los residuos y el exceso de sebo con más facilidad. Este entorno es más saludable para el cabello, y puede volverlo más resistente y brillante.
3. Reduce la caída del pelo
Como antes mencionado, el masaje en el cuero cabelludo estimula la microcirculación de la zona, haciendo más fuertes los cabellos, lo que previene la caída capilar. Además, el cabello es menos propenso a la caída cuando eliminamos los residuos y el sebo de las raíces.
4. Reduce la caspa
El masajeador del cuero cabelludo limpia profundamente las raíces del cabello y elimina de forma eficaz la caspa y la piel muerta.
Se puede utilizar el masajeador tanto en pelo mojado como en pelo seco (aunque para obtener los beneficios de limpieza del cuero cabelludo, hay que utilizarlo en el pelo mojado) y se puede utilizar en todo tipo de pelo.
Modo de uso: Aplica el champú en el masajeador o en el pelo y empieza masajear con movimientos circulares sin aplicar demasiada fuerza. Dentro de poco tiempo empezarás a notar la diferencia.